Escuchaba canciones al suspiro
que fugose descalzo de tu pecho.
Paraíso turgente sin pertrecho
que permite pintarte cual papiro.
La tonada que cantas por amores
es la misma que vierte la pasión.
Exploramos la luz en abrasión
que desprende la sal de tus sabores.
Lo melódico queda descubierto
en el grito que nace por un beso.
La pasión no conoce del receso
y pretende comer anís abierto.
Autor: Jorge de Córdoba
Candentes letras y con mucha sutileza nos dejas estos versares, te felicito por tu apasionada inspiración hecha poesía. Besos y un abrazote hasta esos lares
ResponderEliminarEvitar las sinalefas brinda una ayuda al ritmo uniforme en los versos.
EliminarLa Musa es salvaje o sutil... pero siempre dueña.
Gracias Tere por estar entre versares.
Un abrazo.