No te equivoques, quiero enrojecer
cada palmo del monte que me guardas.
Derribaré columnas y sus bardas
buscando te sublimes, mi mujer.
Mi aliento quemará tus capiteles
de forma que respires mil pasiones.
Es tiempo que permitas a tus dones
estallar superando decibeles.
No te equivoques, somos la encomienda
de irreverencia plena y encendida.
Verás cómo renaces a la vida
logrando que la flama nos extienda.
Autor: Jorge de Córdoba
No te equivoques no es tenaces, es renacemos los dos en uno.😗
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