Sabes que me encontré con tu sonrisa
cuando dormías, quieta a mi costado.
Siento en el corazón un grito alado
todos los huracanes de tu brisa.
Bella, descontrolada y poderosa
robas mis energías con denuedo.
Quieres que te transporte a donde puedo
verte tornar la espina en dulce rosa.
Tiemblas, aún después de derramar
todos los adjetivos de pasión.
Rozas entre tus sueños la abrasión
sobre el monte que acabo de quemar.
Autor: Jorge de Córdoba
Endecasílabos enfáticos
wowwwwwww...jajajajaj parece que en mi ausencia esto se puso cada vez mas intenso!!!!
ResponderEliminarHola Jorge!!! Tambien un libro? Que bien!!Felicitaciones!!!
el poema..tremendooooo ... pura pasion..Hermoso!!Un abrazo grande mu buena semana!!!
¡Hola Eli! ¡Tiempo sin verte!
EliminarGracias a muchas personas, ya se está tramitando el 2º libro de la saga.
Espero te guste.
Y Si... "El fuego es para quemarse... no para verlo arder"
Recibe el mejor de los abrazos.