Una mirada plena de belleza,
de confianza, de garbo y lozanía...
pasea por la jungla y la maleza
de la ciudad, del pueblo o serranía;
despierta los instintos más salvajes,
dementes y carnívoros del hombre.
Una lucha de reyes y de pajes
que buscan o su número o su nombre.
Una mujer conquista cuanto quiere;
lo sabe, lo disfruta y lo provoca,
pues lanza una mirada que nos hiere
causando convulsión en mente loca.
Autor: Jorge de Córdoba
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